2° LUGAR CONCURSO "CUENTANOS TU HISTORIA" - Genoveva Irma López Amador

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  • miércoles, 26 de junio de 2013

  • Genoveva Irma López Amador
    8100039
    Sistema de Educación Media Superior



    Trabajar en la Universidad de Guadalajara es parte trascendental de las experiencias más enriquecedoras que he vivido en 30 años.

    Inicie mi relación laboral muy joven en el Departamento de Proceso de Datos, la oficina estaba exactamente en la esquina de López Cotilla y Enrique Díaz de León, ahora Museo de las Artes.

    El departamento estaba conformado por aproximadamente diez capturistas de datos, las cuales teníamos diferentes edades, hago mención a éste detalle porque ahora somos grandes amigas y aunque algunas ya están jubiladas o por jubilarse, hacemos lo posible por juntarnos por lo menos una vez cada cuatro meses.


    Las funciones que desempeñábamos eran sumamente vitales, pues recibíamos los primeros documentos para la inscripción de los aspirantes (cédula) a la Universidad de Guadalajara, es fascinante recordar que teníamos unas máquinas llamadas perforadoras, las cuales tenían un tambor que quitábamos, envolvíamos una tarjeta y ahí mismo hacíamos nuestros propios programas para capturar datos, ya fueran numéricos o alfabéticos, conjuntamente teníamos unas máquinas a las que les introducíamos unos disquete y ahí capturábamos la información, con esto quiero decir que he tenido la oportunidad grandiosa de evolucionar con la tecnología.
    Fotografía por Andrea Julieta Ruiz López
    de Coordinación de Estudios Incorporados


    Eran tiempos de trabajo excesivo, porque no solo era la cédula de inscripción, sino que también capturábamos los famosos exámenes de conocimientos, estudio socioeconómico, examen psicométrico, calificaciones completas de los certificados de preparatoria cuando hacían trámites al nivel superior etcétera. En aquel entonces el trabajo primeramente lo hacía una compañera y enseguida otra verificaba que lo que se había capturado no tuviera errores, era tal la cantidad de trabajo, que nos quedábamos a velar para que los dictámenes estuvieran en tiempo y forma puntuales.

    Puedo recordar que fueron noches intensas pero gratificantes por diversos motivos, éramos como una familia, ahora podemos contar y recordar tantas y tantas anécdotas que fueron marcando nuestras vidas de una u otra forma.

    En 1983, se inaugura el edificio administrativo de la Universidad de Guadalajara, con el nosotras nos mudamos a estrenarlo. Fue increíble porque estrenamos bueno…de todo, era de los pocos edificios en aquel entonces que tenían una altura que impresionaba, asomarnos a las ventanas era un deleite, porque teníamos como en el teatro el mejor lugar para visualizar atardeceres llenos de nubes y colores, en las noches cuando velábamos podíamos apreciar que los cerros no estaban poblados, la ciudad con sus escasas luces de igual forma era hermosa y qué decir de los amaneceres no menos vistosos que los anteriores.

    Con todo este cambio llegaron máquinas nuevas y las primeras PC. La forma de trabajar tomaba otros matices, los procesos se tornaban cada vez más fáciles, la automatización pasó a ser parte fundamental de la tramitología en la Universidad de Guadalajara.

    1993, un parteaguas en mi vida laboral.

    Las autoridades del Sistema de Educación Media Superior piden personal del edificio administrativo para que se integren a la plantilla laboral del SEMS, entre los compañeros que fuimos propuestos para el traslado, tuve la fortuna de ser informada que mi trasferencia la haría en menos de lo que canta un gallo.

    Al principio me sentí; triste, sola y desamparada, como todo cambio en la vida que de manera inicial uno a veces no tiene la capacidad para saber o enfrentar por ser desconocido, además, en cierto modo me separaba de las que eran mis amigas, casi mi familia, la rutina, el camino de todos los días, fue un cambio drástico, porque no conocía ni la zona, a los compañeros, en fin… era para llorar, pero, la adaptación no tardo mucho tiempo porque mis actividades empezaron a llenar ese hueco que de pronto me invadió.

    Fue un cambio favorable en todos los sentidos, mis actividades cambiaron por completo, también estaba como capturista de datos, pero el trabajo era completamente diferente, porque lo que apremiaba era empezar a digitalizar los libros, los programas de estudio del Nivel Medio Superior. Tenía trato directo con los académicos que se encargaban de hacer los cambios pertinentes a los programas y elegían los textos que conformarían las antologías que posteriormente eran parte de la bibliografía con la que los alumnos se ayudaban para llevar a cabo sus ciclos escolares.

    Con todo este cambio nació en mí la necesidad de empezar a instruirme de otra forma para obtener conocimientos que me llevarían a realizar otro tipo de actividades, descubriendo mis habilidades y poniendo énfasis en la edición, composición de textos y el diseño, claro, esto sugerido por una académica que confiaba en que podría realizar algo más que no fuera la captura de textos, sino más bien empezar a plasmar cierta creatividad en mi trabajo. De esta forma y la inquietud de saber más, me hizo gestionar el apoyo para que se me fuera otorgado un diplomado en diseño gráfico. Y así fue como empecé a estudiar, esto me llevo a que mi trabajo día a día fuera más creativo e interesante, hasta que llegue a estar a cargo en la composición de los programas del bachillerato general, sustentado esta información con un reconocimiento por haber realizado dicha actividad. El hecho es que, hasta la fecha puedo jactarme de haber asistido a trabajar con la mejor disposición y actitud, siempre pensando en qué puedo ser útil laboralmente, con los usuarios y con la comunidad universitaria.

    Con esto me refiero y quiero adelantarme un poco en el tiempo, a que actualmente me involucre con Mary Marroquín de Servicio Médico del edificio administrativo y por medio de este vínculo que hoy por hoy sigue vigente, exhorto a mis compañeros (a) para que cuiden su salud, invitándolos para que se realicen exámenes, estando al pendiente de cómo, cuándo y dónde asistir a realizarlos, además de hacer extensiva la invitación a los familiares, incluso si es posible visito aproximadamente a 300 compañeros que laboran en el SEMS pregunto y otorgo medicamentos. Esta labor para mi tiene una recompensa demasiado agradable, siento que si logro sembrar en los compañeros la inquietud de cuidarse o participar en estas campañas tan importantes de salud, contribuyo y ayudo a cumplir con el objetivo de dicho programa.

    Siguiendo la trayectoria que anteriormente relaté, comento que he conocido a personas excepcionales con las cuales he podido tener un lazo más allá que ser un compañero de trabajo.

    Tengo laborando en el SEMS 20 años, habiendo estado en la editorial que en la actualidad ya no existe, por un tiempo en Educación Técnica y actualmente en la Coordinación de Difusión y Extensión. Perdón por ser reiterativa pero es lo mejor que me pudo pasar, mi camino por esta y todas las administraciones pasadas me han dado mucho; como la oportunidad de estudiar francés en Proulex llegue hasta el nivel 6, el Bachillerato Semiescolarizado, y la carrera en Recursos Humanos.

    Quiero platicar el porqué la considero relevante, fue parte importante y el inicio de una nueva etapa en mi vida y la señalo importante porque para este entonces ya tenía 4 hijos.

    Era el último día para ingresar papeles para el trámite del Bachillerato Semiescolarizado, mi jefa en turno me llamo y me dijo que aprovechara la oportunidad, la verdad me resistía a la oferta que se me estaba haciendo por diversas razones, una de ellas la de más peso era que yo sentía que no iba a poder, así mismo se lo hice ver a mi coordinadora y me dijo: “no quiero saber que pasa este día y tu no fuiste a hacer el trámite”, claro obligándome a hacerlo. Gracias Elvia Velazco, porque ella fue la que me impulso y ayudo a confiar en mí, y más que eso a comprobar que querer es poder, porque nada más se necesita eso, voluntad para trasformar.

    Actualmente soy pasante de la carrera de Recursos Humanos, no he concluido con la titulación porque estoy esperando la oportunidad de hacer una maestría y matar dos pájaros de un tiro. Pero puedo asegurar que la experiencia ha valido la pena. La edad no importa, nunca es tarde, hace dos años que salí de la carrera y a mi medio siglo de vida puedo comprobar que he tenido la oportunidad de ser mejor ser humano, he crecido tanto académicamente como personalmente.

    También he tenido la oportunidad de participar como suplente en la representación sindical, esta experiencia la debo a mis compañeros por creer en mí, y posteriormente como representante titular. Actividad que no hice sola, como sabemos se conforma de un grupo de personas que están por un mismo fin. Dicha actividad me dio la capacidad para relacionarme e involucrarme cada vez más en las cuestiones laborales, siendo crítica, tolerante, observadora, buena oyente además de practicar la empatía con los compañeros, procurando darle el valor exacto a las situaciones o problemas, tratando de ser una persona en la cual los compañeros podían confiar y que cuando fueran agredidos injustamente se les apoyará apegados al Contrato Colectivo, además de recordarles que no nada más tenemos derechos sino también obligaciones.

    Las actividades que hasta ahora realizo en la Coordinación de Difusión y Extensión me permiten visualizar mi trabajo con agrado, porque tenemos que tratar tanto con académicos como con los alumnos, el estar inmersa a las cuestiones culturales me ha permitido ver de cerca lo que los jóvenes son capaces de crear, siempre dan esperanzas de que las cosas pueden ser cada día mejor, la entrega con la que los profesores, alumnos, y compañeros de trabajo participan es parte importante de sentir que realmente no es un trabajo lo que realizamos a diario.

    Teníamos un programa que se llamaba “La Ciencia a la Calle” nuestra participación era involucrarnos en la logística del evento, lo llevábamos realmente a la calle, Palacio de Gobierno, literal a la calle. La participación era impresionante, pues venían tanto de las Preparatorias Regionales como de las metropolitanas, se hacía una convocatoria en la cual los alumnos tenían que llevar a cabo un experimento relacionado con la ciencia, los expositores eran los propios inventores, y tenían contacto directo con la sociedad. Era tal el éxito del evento que la gente pasaba, lo veía y por la tarde regresaban con la familia, nos pedían y decían que deberíamos hacer más de estos proyectos en la Universidad de Guadalajara, se llego a tener presencia de éste evento en otros Estados por la participación y creatividad de los alumnos, puedo asegurar que sí había impacto. Nosotros como trabajadores recibíamos felicitaciones por nuestra labor, ya que eran eventos de cientos y cientos de personas a las que había que atender y resolver cualquier duda o imprevisto. Lo siguiente lo digo con pesar… porque cuando hubo cambio de administración, el coordinador en turno no le llenó el ojo el proyecto y se termino. Lástima!

    Quiero platicar que por medio de una compañera un día se me invitó como maestra de ceremonia a un evento que hubo en el Teatro Diana, también ha sido una experiencia increíble porque nuevamente pensé que no lo podría hacer, creo que no lo hice tan mal porque después de esta intervención, se me ha invitado en cinco ocasiones, esto me han dejado un muy buen sabor de boca. Hubo un evento en el corredor que ahora se llama Rambla Cataluña, se convocó a un gran número de participantes, pertenecientes a un programa de la Unidad de Estilo de Vida Saludable, donde descubrieron que no se me dificultaba mucho poner en buena sintonía a los participantes ya que hubo gritos, aplausos, porras, bueno de todo, siendo la responsable de generar en el público esa atmósfera de alegría y fiesta que ameritaba el evento que se llevaba a cabo.

    Ahora quiero prepararme para hacer visitas guiadas y poder trasmitir a los alumnos y sociedad que esté interesada en saber que quiso plasmar en su obra el muralista Gabriel Flores, tenemos en SEMS dos murales excepcionales con una visión extraordinaria de éste pintor Jalisciense. Son actividades que van a ser propuestas por mí, ya lo comenté anteriormente, así como la Universidad de Guadalajara me ha dado tanto, es una forma de retribuir a todos estos años, que sé, que mi trayectoria tiene un valor importante pues me enorgullece decir que soy UDG!

    Con todo este relato, quiero dejar explícitamente dicho que el trabajo que no está directamente ligado a mis actividades, no es menos importante. La organización y el trabajo en conjunto que hemos venido realizando los administrativos, tiene un valor invaluable porque la Universidad cuenta con personal operativo, administrativo y técnico, capacitado valioso y entregado.

    Un pensamiento que quiero compartir es que la Universidad de Guadalajara hace lo propio al respecto de poner a la disposición un sin número de oportunidades para los administrativos, la decisión de tomarla es de quien las quiera hacer realidad, es para todos. Voluntad y una visión de superación es lo que se necesita.

    Por último, quiero expresar que ha sido toda una travesía volver al pasado, porque me he sentido invitada a recordar tantos momentos, situaciones adversas personales, las cuales han ido de la mano con tantas experiencias laborales, poder hacer una retrospectiva, se convirtió en una dinámica fabulosa, porque he podido imprimir recuerdos que tenía extraviados en el presente.

    TEXTO GANADOR DEL CONCURSO "CUÉNTANOS TU HISTORIA" - CECILIA TORRES CABRAL



  • CECILIA TORRES CABRAL
    CODIGO: 9506578
    BIBLIOTECA PÚBLICA DEL ESTADO



    “ MI HISTORIA COMO TRABAJADOR UNIVERSITARIO”

    Era una tarde del mes de Noviembre del año 1994; eso de las 14:15 horas; aproveche la hora de comida de mi trabajo para acudir a la Guardería que se encuentra sobre la calle de Escorza y Av. Vallarta, en esta ciudad de Guadalajara, Jalisco, para solicitar informes de dicha guardería para ingresar a mis menores hijos: Eduardo y Ernesto.

    A esa hora, había una infinidad de madres trabajadoras recogiendo a sus pequeños hijos, nunca he olvidado los rostros de esas madres: relajadas, felices por estar al lado de sus hijos, y que decir de los pequeñines, haciendo fiesta por reunirse con sus progenitoras.

    Cuando todas esas señoras desaparecieron y tuve la oportunidad de preguntar al personal de la guardería que porque habían recogido tan temprano a los niños, obtuve como respuesta que las madres de éstos niños, trabajaban para la Universidad de Guadalajara, y que a las 14:00 horas, era la salida de su jornada laboral, incrédula y fascinada por tener una oportunidad de laborar donde ellas, y poder disfrutar más tiempo a mis hijos, me dirigí al edificio Administrativo de la Universidad a solicitar informes de donde llevar mi solicitud de trabajo, teniendo como respuesta, que podía entregarla en el Sindicato Único de Trabajadores de la Universidad de Guadalajara, el cual, estaba a unos metros de la Guardería mencionada.

    Llegue al SUTUdeG, con tal entusiasmo, encontrándome en la entrada del mismo, a un señor fornido, güero-colorado, alto, narizón, que ahora se, que se llama Hugo, y le expresé mi deseo por pertenecer a las filas de trabajadores de la Universidad de Guadalajara, él muy serio por cierto, me pregunto ¿Qué sabes hacer?, le dije que era secretaria ejecutiva, que sabía contestar teléfonos, escribir a máquina manual y mecánica y tomar dictados en taquigrafía.

    Pero, era tanto mi entusiasmo, que el sr. Hugo no pudo negarse a darme la oportunidad, me solicito documentos y una fotografía para hacerme una credencial para presentarme hacer los exámenes en el edificio del SEMS, Manuel Acuña y Liceo. Me presente hacer los exámenes, y un mes después recibí la llamada en mi domicilio, donde me decían que tenía que presentarme a laborar al día siguiente a las 08:00 A.M en la Preparatoria de Tonalá. Sentía que el corazón se me salía de la emoción, por fin, mi deseo era hecho realidad, gracias a un Señor que había confiado en mí, sin conocerme, y aunque él no lo sepa, nunca lo he defraudado, me considero una buena trabajadora, y tengo bien puesta la camisa de la Universidad desde ese día y por siempre.

    Inicie mis actividades en la Preparatoria de Tonalá, en el departamento de Control Escolar. Atendía a los alumnos de bachillerato, dando información de su situación académica, así como entrega de cualquier documento personal artesanal, lo digo así, porque era desde recortar y pegar la fotografía de las credenciales, ponerles el nombre, enmicarlas, elaborar los certificados parciales o totales en máquinas de escribir, vaciar las calificaciones de los alumnos en la computadora. En fin, me encantaban todas esas actividades, me encantaba servir a los alumnos, los cuales me transmitían su energía y alegría , y a los profesores, los cuales me compartían su sabiduría. A finales de cada semestre, en temporada de evaluación, me convertía en el paño de lágrimas de ambos, por un lado los maestros renegaban de los irresponsables que los hacían ir en temporada de extraordinarios, y los alumnos porque los maestros los agarraban de bajada y los reprobaban.

    También en esa dependencia fui con mucho orgullo, la secretaria particular de la Maestra Lilia Margarita Lomelí Urquieta, que fue 6 años seguiditos la directora de la Prepa, y después la Asistente Particular, del Ingeniero Gerardo Durán Duran, que también fue director de la Prepa.

    En el año de 2003, me llamaron del sindicato para ofrecerme un escalafón en la Biblioteca Pública del Estado, me la pensé dos veces, antes de tomar la decisión, estaba muy encariñada con mis compañeros de trabajo, en especial con mi amiga Bertha Alicia López Suarez, con los alumnos, los profesores, con mi jefe el Ing. Juan Manuel Duran Duran, este jefe me apoyo mucho cuando yo era Representante Sindical de mis compañeros Adminstrativos, recuerdo que los académicos no querían que los administrativos conviviéramos con ellos en la fiesta decembrina, porque nos consideraban poca cosa, claro no todos los profes, y en charlas con mi director le propuse que hiciéramos la fiesta para los dos gremios y que ya no hubiera discriminación, el director se reunió con los dos representantes de los gremios SUTUdeG Y STAUdeG, y en la posada de la preparatoria de Tonalá, por primera vez, estuvimos reunidos todos los administrativos y académicos conviviendo en un bonito hotel de Plaza del Sol y compartiendo los regalos que donaba el patronato de padres de familia a los académicos, de igual manera, logre una oficina delegacional dentro de las instalaciones de la preparatoria.

    Después de analizarlo, tome la decisión de aceptar el escalafón que me ofrecía el SUTUdeG, y acepte irme a la Biblioteca Publica del Estado, aunque cuando llegue a esta, no fui aceptada por el Doctor Carlos Fregoso Gennis, el director, los motivos no los conocía, pero, me dieron una carta diciéndome que me ponían a disposición de relaciones laborales para que me reubicaran, esa acción me pareció descortés de su parte, y fui al Sindicato y me dijeron que ellos me habían asignado y esa orden debía respetarla y acatarla el Dr. Fregoso, y el desacato del director duro una semana, pero, yo espere tranquila todos los días de mi jornada sentadita en la sala de espera de la biblioteca, hasta que por fin, me recibió el director y me convertí en la Bibliotecaria de la tan prestigiada Biblioteca Pública del Estado “JUAN JOSE ARREOLA”, y con el tiempo, recibí muestras de cariño del director, llamándome “MI ABOGADA DE CABECERA”.

    A Consecuencia de las fracturas que tuvo el edificio de la biblioteca Pública del Estado, sede Agua Azul, cerro sus puertas al público, por el periodo de un año, en el cual, todos los trabajadores nos dimos a la tarea de limpiar libros, repararlos, y prepararnos para cambiarnos a la sede de 16 de Septiembre.
    Biblioteca
    Fotografía por Indira Merary Guardado Bueno
    de CUALTOS

    Nos cambiamos a 16 de Septiembre, en el mes de abril del 2004; al inicio no había usuarios, así que nos dimos a la tarea de hacer difusión, hicimos trípticos y días entregábamos afuera de la biblioteca, otros enfrente de catedral, investigamos cuantas escuelas había a los alrededores de la biblioteca, y acudimos con el director y maestros, así como a la hora de salida de los alumnos para invitarlos a las visitas guiadas y a los talleres, y, al cabo de un año, ya teníamos usuarios, y lleno total en los talleres de fomento a la lectura.

    En 2008, temporada de lluvias, eso de las 18.00 horas; estaba cayendo un tormenton en el centro de Guadalajara, y previo a la tormenta, afuera de la biblioteca, estaban trabajando los del ayuntamiento, dejaron una reparación inconclusa en la banqueta, en la esquina de Juan Manuel y Alcalde, área donde se inunda en temporal de lluvias, era tanta el agua acumulada que venció el subsuelo e ingreso toda esa agua de la tormenta a la biblioteca a través de un hoyo de aproximadamente de 40cms. de circunferencia. Yo estaba a escasos metros de la catastrofe. Era tanta el agua que ingresaba que empezó a inundarse rápidamente mi área de trabajo, en ese preciso momento, no había ningún jefe en la biblioteca, así que actué sin pensarlo, ordene inmediatamente a los usuarios que se retiraran, quedando voluntariamente solo tres usuarios para apoyar, forzamos las puertas del departamento de procesos técnicos, lugar donde se almacenan libros en cajas para su captura en Aleph, cajas que estaban sobre estanterías, sobre mesas y sobre el suelo, era un almacén de libros, e hicimos una cadena humana para poner a salvo todos esos libros, y los que se mojaron, rápido les dimos los primeros auxilios, sacándolos de la caja mojada y poniendo hojas secas entre sus páginas, en cuanto nos desocupamos del piso contemporáneo, fuimos rápidamente a apoyar a Martha Silva, al área de hemeroteca, anduvimos trepados como changos entre las estanterías, sacando las cajas con periódicos de entre las estanterías y trasladarlas a una parte alta, inmediatamente sacamos los periódicos de las cajas mojadas y los pusimos sobre mesas, aunque parezca increíble, no hubo pérdidas en los periódicos, a pesar de la cascada de agua que caía sobre ellos.

    El día del desastre, no me importo mojarme de agua sucia, no sentía el cansancio, trabaje sin parar hasta la madrugada, ese día, supe cuánto amor le tengo a mi centro de trabajo, el orgullo que siento por ser universitaria, ese día pude devolver un granito de arena, a tantas satisfacciones que me ha brindado la Universidad de Guadalajara, ese día no sé si hice bien o mal las cosas, solo sé que hice lo que me dicto el corazón. “Salvar el patrimonio de la UdeG.”

    La sede de la Biblioteca en 16 de Septiembre, fue cambiada a Belenes, en el Centro Cultural, así que va de nuevo, empezamos a empaquetar los libros y organizarlos, desarmar las estanterías, para que los mismos, llegando a su nuevo destino, Periférico Norte y Parres Áreas. Desempacamos los libros, armamos estanterías, acomodamos los libros, y espere ansiosa el día de la inauguración 08 de octubre de 2012; y, el día en la Biblioteca abriera sus puertas a los usuarios.

    Estoy en el piso 2, en el Fondo Contemporáneo, me gusta mi trabajo, me gusta servir a los usuarios. Cuando se presenta un problema en mi piso, trato de resolverlo, y cuando no está en mis manos, lo expongo a mi jefe inmediato, me gusta organizar el trabajo y ver la manera que mejor resulte, distribuyo actividades a los prestadores del servicio social, trato de tener buena comunicación con ellos, los hago sentir parte del grupo, eso me da buenos resultados en el trabajo, ellos ven la manera en que me dirijo con los usuarios, y ellos imitan mis acciones, eso me llena de satisfacción. Mis jefes me encomiendan trabajos confiando en mi capacidad, y para mí, es un honor realizarlos, porque cada enmienda me deja un nuevo aprendizaje. Definitivamente me gusta servir, ayudar, apoyar, porque si no, que vacía fuera mi vida.

    Cuando ingrese a la Preparatoria de Tonalá, solo contaba con la Secundaria, ahora, soy Abogada Titulada, gracias a la Universidad de Guadalajara, y el SUTUdeG, he logrado lo que soy y lo que tengo.

    Iniciativa ciudadana, consulta popular y la ausencia del IFE

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  • viernes, 9 de noviembre de 2012


  • • Hasta el momento ha pasado prácticamente inadvertida la posibilidad de ejercer las iniciativas ciudadanas y las consultas populares


    Francisco J. Díaz A..- El 9 de agosto del presente año se publicó en el Diario Oficial de la Federación el decreto por el que se reforman y adicionan diversas disposiciones de nuestra Constitución en materia política. Esta reforma constitucional trajo como consecuencia casi inmediata el primer ejercicio de la atribución presidencial con respecto al trámite preferente de iniciativas presentadas por el presidente de la república.

    Asistimos así a un acto político en el contexto de la llamada reforma política, que para este caso –según lo afirman sus impulsores– pretende acabar con la parálisis legislativa que supuestamente acontece por la falta de acuerdos entre las fuerzas políticas representadas en el Poder Legislativo, o bien, por la falta de acuerdos entre el Legislativo y el Ejecutivo federal. No fue obstáculo para el procesamiento legal de las iniciativas preferentes la ausencia de reglamentación de este instrumento legal, como tampoco será posible determinar, en tanto no se aprobase una reforma constitucional similar, qué suerte correrían las iniciativas que con este carácter se presentaran, si acaso se hubiese considerado, como en otros países, la afirmativa ficta como principal herramienta que limitara la pasividad o la inacción legislativa.

    Bajo el régimen de República representativa y democrática, el ejercicio del soberano se realiza por medio de los poderes de la unión. Foto Notimex

    No se pretende reflexionar sobre si una mayor cantidad de leyes, o de reformas legales, necesariamente implica una mejor calidad del marco legal. Por el contrario, se afirma que en muchas ocasiones se ha demostrado la baja calidad con la que se legisla en nuestro país, no sólo en la parte del procedimiento que se lleva en la elaboración o modificación de las leyes, sino principalmente por la distancia que guardan los “productos” normativos que aprueban, con respecto a los más elementales principios de técnica legislativa que es fundamental observar tratándose de los instrumentos que precisamente se crean con el fin de regular, en lo público y en lo privado, las distintas y muy variadas temáticas de nuestra vida política, económica y social.

    Bajo el régimen de República representativa y democrática, el ejercicio del soberano se realiza por medio de los poderes de la unión, razón por la cual resulta por demás interesante observar que en esta misma reforma constitucional se aprobaron otro par de instrumentos o herramientas normativas, que vistas con mucho entusiasmo pudiera considerarse que tienen como propósito el empoderamiento ciudadano. Curiosamente, hasta el momento ha pasado prácticamente inadvertida la posibilidad de ejercer las iniciativas ciudadanas y las consultas populares, como mecanismo quizá óptimo para el establecimiento de una relación política diferente entre gobernantes y gobernados, o cuando menos como parte del más novedoso arreglo institucional.

    No hace falta sustentar demasiado el hecho de que en el imaginario o en el mundo de la política, la dicotomía y confrontación mental más notoria se da entre “ciudadanos” y “políticos”. Lo cierto es que una reforma de este tipo, más allá de la efectividad o pertinencia que para el proceso legislativo pueda tener, conlleva la idea de que los ciudadanos tenemos muchas y mejores cualidades para tomar decisiones, pues nosotros nos encontramos ajenos a todo ese obscuro mundo de intereses en los que se inmiscuyen los políticos profesionales.

    La noción más elemental de democracia probablemente se funda en la idea de que una mayoría de personas seguramente pueden conducir de mejor forma la vida pública. En esta lógica la amplificación de los derechos del ciudadano, que ahora tiene facultades constitucionales para iniciar leyes, lo mismo que para convocar a consultas populares, supone cuando menos la posibilidad de ser sujetos activos y actuantes en una esfera de conducción política a la que antes nos encontrábamos ajenos.

    Sin embargo, esta nueva facultad o derecho de la ciudadanía encuentra como primera restricción la capacidad de organización que se requiere para la realización de un ejercicio democrático de esta naturaleza. Para convocar a una consulta popular, se requiere cuando menos un número equivalente al dos por ciento de los inscritos en la lista nominal de electores, es decir, cerca de un millón 600 mil ciudadanos que coincidan en voluntad y objetivos. Para ejercer el derecho de iniciar leyes, es necesario por lo menos un número equivalente al 0.13% de la lista nominal de electores, es decir, casi 104 mil ciudadanos que deseen presentar la iniciativa de ley.

    En el caso de la consulta popular, se tendrá que realizar, dice la Constitución, el mismo día de la jornada electoral. Amén de la reglamentación que en su momento se tendrá que emitir, corresponderá al Instituto Federal Electoral (IFE) la verificación de los requisitos, así como la organización, desarrollo, cómputo y declaración de resultados. Lo que resulta verdaderamente interesante de esta herramienta es que cuando la participación total corresponda, al menos, al 40% de los ciudadanos inscritos en la lista nominal de electores, el resultado será vinculatorio para los poderes Ejecutivo y Legislativo federales y para las autoridades competentes.

    ¿Qué sucedería si al igual que con la iniciativa preferente se presentara ante el Congreso una iniciativa ciudadana, sin que exista hasta el momento la reglamentación de la misma? ¿Qué tratamiento darían los diputados y senadores si se presentara una iniciativa de origen ciudadano que propusiera modificaciones legales, precisamente en el sentido inverso del que las cámaras hayan procesado? ¿Qué impide a los sindicatos y organizaciones que se oponen por ejemplo a la modificación a la Ley Federal del Trabajo, a convocar y organizar un ejercicio como éste?

    En días pasados el IFE presentó su Plan Estratégico de Trabajo 2013-2015, mediante el cual se hace la presentación y justificación del presupuesto que se pretende ejercer durante ese periodo. Se señala en ese documento la intención de hacer más eficiente su labor, mejorar la imagen institucional, fortalecer el régimen de los partidos políticos, tener un nuevo modelo organizacional y como novedad, desarrollar indicadores de desempeño basados en objetivos por dirección de área y por unidad responsable. Qué bueno hubiese sido que así como declaran la intención de fortalecer las actividades que implican una vinculación con la ciudadanía, se hubiera propuesto como principal acción estratégica impulsar los mecanismos de democracia directa que recién se incorporan a nuestra máxima ley.

    fjdiazaguirre@gmail.com

    ALTAR DE MUERTOS A LA LEY FEDERAL DEL TRABAJO

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  • lunes, 5 de noviembre de 2012


  • Por Alejandro Quezada y Guadalupe Estrella, Buffete Jurídico del SUTUdeG

    LA MUERTE NO REPRESENTA EL FINAL DE LA VIDA, SINO EL INICIO DEL CAMINO A UNA NUEVA FORMA DE EXISTIR.

    Partiendo de esta creencia, se puede apreciar que los seres humanos cuando morimos, muere únicamente el cuerpo pero seguimos teniendo existencia, por lo que al presente altar aplica bajo el siguiente mensaje:


    La ley Federal del Trabajo aunque ha sido reformada, esta ha muerto, ya que cambió a una nueva forma de existencia, del 18 de agosto de 1931 que fue cuando se le dio vida al esfuerzo, sacrificio y sangre de miles de trabajadores, pero en la actualidad dicha lucha de la clase laboral la han matado y la han enterrado diversos actores políticos, entre ellos; CALDERON y CORDERO.


    Han creado su panteón propio donde le han dado sepultura al salario mínimo; a la autonomía sindical, al escalafón, a la libertad de despedirnos cuando cumplamos 20 años de antigüedad, destrozaron una jornada laboral de 8 horas, y le han puesto tope a lo que son los salarios caídos… entre otros derechos.

    Con los derechos que teníamos con la Ley Federal del Trabajo creada en el año de 1931, alcanzábamos para poder tener acceso a una canasta básica, siendo la mujer el pilar de: la administración de la economía familiar, del amor, de los esfuerzos y de la armonía del hogar, inclusive nos alcanzaba para tener diversiones acordes al presupuesto del producto de nuestro trabajo. Estos esfuerzos han sido enterrados por muchos de los actores políticos salientes y actuales.



    Ahora con estas nuevas reformas, nuestros representantes populares se dan el lujo de darnos a comer “PURO  CHILE” (p` que agarren el que quieran).

    En octubre de 2012 HA MUERTO la LEY FEDERAL DEL TRABAJO, entendiéndose como Ley Federal del Trabajo, el producto de la lucha de miles de trabajadores que a través de tantos años habían conseguido que los derechos se materializaran legal y legítimamente en una ley.

    Ahora le han dado vida a un instrumento de explotación y manipulación al gusto de la clase capitalista que demagógicamente la han llamado reformas A LA LEY FEDERAL DEL TRABAJO careciendo de toda legitimidad.

    LEY FEDERAL DEL TRABAJO
    18 de agosto de  1931      -          Octubre de 2012  +

    ‘El Lazca’, los presidentes y el FMI

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  • lunes, 29 de octubre de 2012


  • Francisco Díaz.- La estimación de la relevancia que para la vida nacional tiene la noticia de la muerte de El Lazca, presunto líder de los zetas, o la afirmación del Fondo Monetario Internacional (FMI) respecto a la desaceleración de la economía mexicana, o bien, la reunión sostenida entre Felipe Calderón Hinojosa y Enrique Peña Nieto, depende de la disposición personal que cada receptor de información tenemos, en función de nuestra experiencia individual.

    En primeras planas se consigna la información sobre el abatimiento del cabecilla del célebre grupo delictivo, así como la posterior desaparición o robo del cuerpo del mismo. Se acompaña la nota de la crónica de los hechos, siempre insuficientes, que narran los acontecimientos y circunstancias, generando sin duda en el lector, escucha o televidente toda la serie de dudas y especulación que nuestra imaginación es capaz de producir.



    Si nuestras incógnitas, nuestros temores o suposiciones sobre el futuro tienen más que ver con las condiciones de crisis económica global y sus efectos, quizá nos despierte mayor interés especular con respecto a las medidas y planes de ajuste que, siguiendo los dictados del FMI, sin mayor remedio se tendrían que implementar, aun a pesar del consecuente incremento de conflictividad que podría reubicarnos en el estado de crisis social que nadie quisiera.

    De la misma forma, cuando nuestro sistema de creencias se encuentra mayormente influenciado por expectativas de conformidad al espacio de la política y la toma de decisiones públicas, lo más probable es que concentremos la atención en la serie de reuniones que los presidentes, entrante y saliente, han sostenido en los días recientes, pues podríamos suponer que de dichos encuentros se podrían derivar las políticas gubernamentales, públicas o de Estado, bajo las que habremos de discurrir, en los próximos años, nuestras habilidades y nuestras disonancias sociales.

    No obstante de la propensión que se tenga, quizá valga la pena ejercitar nuestra creatividad relacionando entre sí la información disponible, pues bien podríamos reflexionar sobre los cursos de acción que podrían o deberían ser modificados por el gobierno entrante, con respecto a la política criminal y de persecución al narcotráfico, máxime si consideramos que cuando menos dos de los encuentros presidenciales han tenido como tema la seguridad.

    Si partimos de que el narcotráfico se afirma como un problema de seguridad pública y seguridad nacional, podríamos imaginar a Calderón y Peña Nieto charlando sobre todo aquello relacionado con las bandas delictivas y jefes criminales que como El Lazca ocupan los titulares en las noticias. Igualmente podríamos suponer que dialogan al respecto de las estructuras en las que se sostiene un fenómeno de la índole y dimensión del tráfico de drogas. También podríamos intuir que intercambian opiniones en relación a la agenda global de combate al narcotráfico o sobre la serie de acuerdos que de forma inevitable se toman con el gobierno norteamericano.

    Resulta válido suponer que si el más reciente encuentro tuvo que ver con los temas de la economía, quizá la información y opiniones que se comparten tienen que ver con las relaciones políticas y económicas que nuestro gobierno establece con los organismos de financiación internacional, al igual que con los gobiernos de las principales economías, pues evidentemente son estos últimos los que determinan el rumbo y las pautas que en la economía y la política se encuentran obligados a seguir los países que como el nuestro requieren de créditos internacionales.

    Ahora bien, si partimos de que el narcotráfico está considerado también como un problema de seguridad global, ¿qué tan explícito será el intercambio entre presidentes tratándose de acuerdos globales para el abordaje o la atención del tráfico de drogas? Es decir, con independencia de los juicios morales que pudiésemos tener al respecto de “pactos” con delincuentes, sin duda la política criminal que nuestro país implementa se encuentra altamente influenciada, si no es que conducida, por quienes aportan los recursos técnicos, materiales y financieros para el combate al narcotráfico.

    En este mismo tenor, partiendo de que el tráfico de drogas genera billones de dólares de ganancia en toda el orbe, a quienes participan de estas actividades, sean personas, grupos o países, ¿qué tanto se explicita entre mandatarios el grado de involucramiento o inoculación que la economía tiene, derivada de estas actividades ilícitas? Una ventana de abordaje -o cuando menos de observación- del fenómeno global del tráfico drogas es el mercado financiero internacional, como también lo son las actividades de la economía formal o informal de cada país que participa en estos intercambios, sin que para lo anterior sea obstáculo el nivel de permisividad o persecución instituido.

    Se acepte o no, el narcotráfico es antes que otra cosa un gran negocio, lo cual no significa que deba haber o exista conformidad al respecto. Este apunte se vierte en el sentido de reconocer las características esenciales del fenómeno, lo cual sería indispensable, si es que de verdad se quiere combatir el mismo, bien sea con fines de acabar, inhibir o controlar el tráfico de drogas.

    El narcotráfico genera graves problemas de salud pública; bajo esta óptica resultaría prioritario inhibir el consumo, quizá a través de políticas que propendan a la prevención del mismo. Como toda actividad ilícita, para desarrollarse requiere un grado de soporte, generalmente logrado mediante la corrupción, en las instituciones y organizaciones formales del Estado; ante ello, sería oportuno enfatizar las acciones hacia la inhabilitación de todo aquello que propicia la corrupción, como lo es la impunidad.

    Sin embargo, no habrá lucha eficaz contra este tipo de delincuencia si el abordaje y estrategia se reduce a una confrontación directa en el ámbito de los más deliberados comportamientos de hostilidad, agresión y violencia, pues si bien es cierto que una de las principales funciones del Estado es garantizar la seguridad de los pobladores, para lo cual se reserva el monopolio del uso de la violencia, también es cierto que se debe atender el fenómeno desde su estructura, lo cual incluye las normas bajo las que éste se rige.

    Así las cosas, en tanto no se altere el orden financiero global, se ataquen los cimientos de las estructuras financieras en los países y se castigue la eficacia de las finanzas en el crimen organizado (narcotraficantes, empresarios o políticos), seguiremos siendo partícipes involuntarios del reality show que por destructivo sostiene el mayor nivel de audiencia en nuestro país.

    Coparmex, Canacintra y la ignorancia

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  • lunes, 8 de octubre de 2012
  • Francisco J. Díaz A.- Leer las recientes declaraciones que en torno a la reforma laboral han expresado algunos dirigentes empresariales es una experiencia como la que dicta aquel comercial: no tiene precio. Si nuestra capacidad de asombro, tratándose de temas políticos, no estuviese demasiado mermada, podríamos incluso afirmar que resulta alarmante.

    Más allá de exponer sus argumentos con supina ignorancia (acéptese el pleonasmo), los representantes empresariales, principales personeros, impulsores y promotores de la actual reforma legal, exteriorizan agudas carencias cognitivas en torno a temas de los que mejor sería que no opinaran. Además de ello, se manifiestan las razones por las que una acción pública de esta naturaleza exhibe la más pura condición humana, en la cual la contradicción existe de forma inevitable. Esta contradicción la podemos identificar en diversos niveles, siendo el primero y más evidente el de la controversia política.
    Cuando el máximo dirigente de la Coparmex en Jalisco afirma que con la reforma a la Ley Federal del Trabajo se acabará con la lucha de clases, queda muy claro que no es requisito para ser dirigente empresarial tener el más elemental conocimiento sobre las tesis del materialismo histórico; sin embargo, sería primordial entender que la lucha de clases existe y existirá mientras vivamos en una sociedad clasista, dividida y confrontada, sobre todo por las desigualdades e inequidades económicas que la mayoría sufre, lo cual arraiga en la mente y quizá en el espíritu de muchos, la necesidad de combatir, de luchar contra un orden social que se considera injusto.

    Cuando el dirigente nacional de la Canacintra sugiere que ya es tiempo de hacer a un lado la autonomía sindical, hace patente lo más burdo y lamentable de la conducta humana, como lo es pretender limitar la libertad de otros y negar para los demás el ejercicio de los más elementales derechos humanos. Este tipo de afirmaciones muestra el desconocimiento absoluto de los axiomas en los que se sustenta el principio de autonomía sindical, como también evidencia la ignorancia sobre las obligaciones legales que, según nuestra propia Constitución, tenemos con el derecho internacional, al respecto de garantizar el derecho a la libre asociación y autodeterminación de las organizaciones obreras o patronales, en virtud de los convenios que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha sancionado y nuestro país suscrito.
    No debería ser extraño para los dirigentes empresariales el conocimiento sobre lo más elemental en la historia de los derechos laborales, que en el ámbito internacional tienen un referente importante en la creación misma de la OIT, la cual se funda en el marco de las negociaciones del Tratado de Versalles, con el cual se pretende generar la paz mundial después de finalizada la primera guerra mundial. Conveniente sería que se conocieran los principios de la Declaración de Filadelfia, promulgada en 1944, la cual establece que: 

    1. El trabajo no es mercancía; 
    2. La libertad de expresión y de asociación es esencial; 
    3. La pobreza en cualquier lugar constituye un peligro para la prosperidad en todas partes; y, 
    4. La guerra contra las carencias se debe desatar con vigor implacable.

    Por otra parte, a sabiendas de que ninguna medida concreta en el ámbito político puede poseer la dignidad de una verdad científica, podemos revisar el principio de contradicción citado en un segundo nivel, relacionado con los fundamentos del orden justo, el cual ha sido debatido desde los inicios de la vida en sociedad. En esta lógica citamos la afirmación que a través de un comunicado emite el Consejo Coordinador Empresarial en el sentido de “adaptar la Ley Federal del Trabajo a las circunstancias y necesidades de la economía moderna”. ¿Cuáles son las necesidades de la economía moderna? Hasta antes de esto cualquiera hubiera pensado que las necesidades las tienen los individuos y las sociedades, no la economía. En este mismo tenor, ¿las circunstancias de la economía moderna corresponden a lo que pudiésemos considerar un orden justo? Quizá para las cúpulas empresariales, sí.

    El quehacer público y la acción política encuentran desde siempre un conflicto por la definición del orden justo. Quizá de manera simplista, podemos alinear en dos grandes grupos las ideas que defienden tesis opuestas: la primera de ellas afirma que las desigualdades corresponden a un orden natural y por lo tanto, en toda sociedad se deben aceptar; bajo esta tesis la estratificación, jerarquización y diferenciación social es algo natural. La segunda tesis propende a evitar o contener los abusos de la riqueza, el poder y la condición humana “natural”; en esta posición, la legislación debe actuar en sentido opuesto a la naturaleza.

    Un último nivel de análisis lo podemos significar a partir de identificar lo que cada quien encuentre como las finalidades últimas de la acción humana y/o de la vida en sociedad. En este punto es indispensable considerar que las sociedades, las personas, los políticos, los ciudadanos, los empleadores y los trabajadores, normalmente piensan y actúan según sistemas de valores que se constituyen como marco referencial, muchas veces divergentes y otras veces opuestos, en un intercambio continuo donde el individuo se afirma y define en función de su propio medio.

    Así las cosas, las finalidades últimas que se persigan serán siempre subjetivas a cada caso particular, así como a cada grupo o individuo que se involucre en las acciones humanas, las que según sus fines y medios encontrarán siempre una rebeldía a toda instrucción exterior a su esencia. El “mercado” (y quienes piensen y actúen en su lógica) rechazará siempre todo aquello que cuestione o limite la libertad de imponer un orden natural donde para el más fuerte será siempre permisible disponer de mayores recursos, por encima de los más débiles, dado que eso es inmanente a su naturaleza. La justicia (y quienes pretendan orientar sus pensamientos o actos en función a ella) rechazará siempre lo que signifique un desequilibrio o desigualdad entre sujetos que en la vida social se comprometen a frenar y contener lo más primitivo de sus impulsos naturales.

    No obstante, lo visto hasta hoy es que la historia de esta reforma legal es la tragedia de una clase empresarial que hace sus leyes, pero no sabe las leyes que hace.
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  • miércoles, 3 de octubre de 2012

  • Dimensiones y efectos de la reformal laboral


    Francisco J. Díaz A.- Entre tantas opiniones que se vierten, o posiciones políticas que se asumen, frente a la reforma laboral, resultaría oportuno reflexionar el tema desde un espacio con mayores herramientas metodológicas que pueden resultar útiles, ya sea para la toma de decisiones o cuando menos para emitir diagnósticos más certeros sobre el estado de la cuestión.

    Evidente es que este acontecimiento transcurre principalmente en una dimensión jurídica, pues se trata en principio de una reforma a un ordenamiento legal. Incontrovertible es que los mismos hechos tienen una perspectiva económica, lo cual en forma lógica utilizan los impulsores o detractores de la citada reforma a la Ley Federal del Trabajo. En este sentido, podemos afirmar también que tanto en las relaciones individuales de trabajo como las colectivas, son fenómenos que no pueden entenderse en forma plena si no se revisan también sus dimensiones política y social.

    Si se tratase de dar una opinión, basta con emitirla. En cambio si lo que se busca es hacer un adecuado análisis, nos parecen demasiado simplistas los juicios que se hacen comúnmente sobre la actividad sindical, ya que lejos de ver a los sindicatos como los complejos fenómenos sociopolíticos que son, se reducen a una obtusa e insuficiente visión construida sólo sobre la base de la forma en que los líderes sindicales llevan a cabo su función.

    Dicho de otra forma, al hablar de sindicatos la mayor parte de opinólogos que se escuchan o se leen, se reduce a creencias compartidas y/o juicios populares que sin duda se generan sobre la base de hechos lamentables, controvertibles o deleznables en los que han incurrido una cantidad importante de dirigentes sindicales. Así las cosas, una buena parte de la discusión pública que hoy día se hace sobre el tema, transcurre en el espacio deliberativo, o más bien discursivo, del intercambio de acusaciones que impulsores o detractores de la reforma hacen con respecto a los sindicatos. Pareciera entonces por momentos que una decisión nacional de esta envergadura se limita a la negociación que líderes sindicales podrán hacer para no resultar afectados en lo que ellos consideren que afecta su interés.

    De la misma forma encontramos insuficientes, y por lo tanto afirmamos que carecen de fundamento, aquellas versiones que sostienen como un hecho indudable que una vez modificada la ley, en el sentido de “flexibilizar” las relaciones laborales, se tendrá como resultado inmediato el incremento en la productividad, así como en las fuentes de trabajo y empleos que tan necesarios son hoy día.

    Al parecer el resultado de la negociación del conflicto, a la vez que del intercambio político que se aproxima, será en el sentido de conceder a los sindicatos mantener prácticamente las mismas condiciones jurídicas, políticas y económicas que disfrutan, a cambio de permitir ellos la flexibilización del mercado de trabajo, que en realidad no es otra cosa que dinamitar el principio de estabilidad laboral, a través de legalizar los contratos temporales (de capacitación o de prueba) y los contratos por horas.

    De las posiciones encontradas que hasta hoy se confrontan en la arena pública, en el debate legislativo, o en los espacios mediáticos, no encontramos una sola propuesta o contrapropuesta que tenga suficiente fundamento, y que por lo tanto pueda resultar viable, pues todas ellas carecen de la más elemental ubicación contextual. Se pasa entre otras cosas por alto, la causalidad en la relación histórica que tiene estos hechos con el pasado, reciente y remoto.

    En la historicidad de todo suceso se puede identificar la direccionalidad que ha tenido, o la que se ha pretendido dar a temas como el de esta magnitud. Sólo por citar un ejemplo, se nos dijo antes que con la aprobación del Tratado de Libre Comercio y con la consolidación de las políticas y del modelo económico de libre mercado lograríamos atraer mayor inversión extranjera, la cual crearía más y mejores fuentes de empleo, lo que junto con el intercambio comercial nos traería una indudable mejoría en nuestros ingresos, salarios y oportunidades. Los resultados todos los conocemos.

    Antes y ahora las decisiones públicas tendrían que considerar que toda acción política implica un riesgo derivado de las consecuencias previsibles, pero sobre todo de aquellas no previsibles. Lo cierto es que las decisiones, acciones y consecuencias resultan conformes a los axiomas y valores en los que se fundan, independientemente de nuestra coincidencia o no con estos principios.

    Los intereses que hay en esta reforma son más o menos evidentes, pero ¿cuáles son los principios en los que se basará esta decisión? Valga la pregunta con independencia de los intereses que logren imponerse y sea cual sea la reforma que al final se apruebe.

    Ejercer la acción de gobierno no siempre será agradable a todos, no obstante que se tenga una vocación democrática bajo lo cual pretenda decidirse en función de la conformidad mayoritaria. Vale la pena considerar que no siempre la mayoría está bien informada, no siempre la mayoría tiene claridad sobre las distintas opciones disponibles, así como casi nunca la mayoría tendrá un análisis claro de los riesgos que implica determinada decisión, ni tampoco las consecuencias previsibles y efectos no deseados de determinada acción.

    En un misma acción los efectos no deseados por unos, pueden ser deseables para otros. Los empleos que se tienen que crear, si de verdad se quiere mejorar la condición de millones de familias, deben ser empleos estables y bien remunerados; lamentablemente lo que se propone no apunta en esta dirección, sino en el sentido contrario.

    No obstante, quizá lo que precisamente hace falta en nuestro país es que la necesidad y el malestar de los trabajadores sea aún mayor, de forma tal que ante el incremento de la tensión social, detone un movimiento amplio y popular, producto del hartazgo, que sacuda a las instituciones desde sus cimientos y genere con ello una transformación profunda en nuestra vida política, económica y social. Sólo esperemos que esto no suceda en forma violenta.